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POLÍTICA. Las negociaciones de González

El legislador Oscar González estará de licencia por seis meses y no se sabe si regresará a la banca. Antes de acogerse a la licencia, hubo una negociación entre el legislador y las máximas autoridades de la Legislatura de Córdoba, en la que quedó expuesta la fragilidad de su situación política.

El vicegobernador Manuel Calvo; el presidente del bloque oficialista, Francisco Fortuna; y hasta el ministro de Gobierno y Seguridad, Julián López, tuvieron varios contactos telefónicos con González, según consigna el rotativo La Voz.

De acuerdo a la información, quien más trabajó para convencerlo de que diera un paso al costado efectivizando su renuncia fue Fortuna: entre martes y miércoles pasados, habló más de dos horas con su colega y compañero de generación peronista.

En este contexto, las fuentes oficiales aseguran al tabloide que el gobernador Juan Schiaretti no tuvo contactos con el legislador. Se mantuvo distante.

Según trascendió, el pedido –con manto de “sugerencia”– fue que renunciara a la banca. González, un experimentado de la política, eligió un camino intermedio: licencia por seis meses.

En base a lo expuesto en la prensa capitalina, es probable que González no vuelva a su banca, pero el legislador de Traslasierra se conservó una cuota mínima de negociación, para no quedar a la intemperie, en el llano, un lugar poco deseado para quien desde hace muchos años está bajo el abrigo del poder.

Pero, sin dudas, en lo político quedó aislado. En una acalorada discusión reservada en el bloque oficialista, la mayoría quería que se le exigiera la renuncia. “Nadie lo defendió”, admitió un peronista a La Voz.

Finalmente, alumbró un acuerdo para un frágil control de daños. Sin embargo, ocurrió algo inédito en los 23 años del PJ en el poder: hubo disidencias.

Es que Julio Bañuelos y Alfredo Altamirano, legisladores del Departamento San Alberto y residentes en Mina Clavero, el lugar donde vivía la víctima fatal del choque, no votaron la licencia y pidieron públicamente su renuncia.

Otros dos históricos peronistas, los exministros delasotistas Carlos Alesandri y Walter Saieg, tampoco votaron su licencia. Sin hacer ruido para no agitar aún más la caliente interna oficialista, se ausentaron al momento de votar.