Comenzó esta semana un juicio por gatillo fácil en Tribunales II de la ciudad de Córdoba, en el marco de una causa en la que están imputados dos policías por el asesinato de José Ávila (foto): Lucas Gonzalo Navarro y Sebastián Juárez, de la División Motos de la Comisaria 18.
El Tribunal está compuesto por Gustavo Ispani, María de los Ángeles Palacio de Arato y Leandro Quijada. Las carátulas son de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y funcionario público.
En la primera audiencia, se presentaron dos testigos del hecho: uno de ellos es el dueño de la casa donde asesinaron a José y el otro es un vecino. Desafortunadamente no asistió el abogado querellante de la familia Ávila, Carlos Nayi, y eso resta lo que puede exigirse en una audiencia, porque deja todo en manos de la Fiscalía que investigó.
La Fiscalía de Cámara pide una pena elevada, de más de 20 años. El martes 14 de junio, sería la sentencia en este caso de gatillo fácil que tiene a policías como protagonistas. La familia Ávila es acompañada por las familias de otras dos víctimas de gatillo fácil de 2020: la madre de Joaquín Paredes, Soledad Paredes, y la de Blas Correas, Soledad Laciar.