No hay fundamentos para esperar que en los próximos meses el proceso inflacionario se detenga. Esto ocurre en un país donde el 35% de los niños son pobres y no saben leer, escribir, sumar ni restar.
El costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó en septiembre 7,1 %, por lo que una pareja con dos hijos necesitó percibir $56.732 para adquirir la cantidad mínima de comida y no caer en la indigencia, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
En tanto el costo de la Canasta Básica Total (CBT), que marca el umbral por debajo del cual se cae en la pobreza y que incluye servicios además de alimentos, alcanzó en septiembre los $128.214, con un aumento también del 7,1% mensual.
En los primeros nueve meses del año, el valor de la CBA se incrementó el 64,8 % y el de la CBT avanzó 60,2 %. Mientras que entre septiembre de este año e igual mes del 2021, el precio de la CBA se incrementó a 78,4% y el de la CBT a 73,1%.
La situación es preocupante. En base a datos oficiales, la inflación en septiembre fue de 6,2%. Como desde marzo se viene observando tasas de crecimiento en los precios en el orden del 6%, la proyección para todo el año llega al 100% anual.
Es notable que la aceleración de precios continúa en niveles muy altos, con impactos sociales y productivos muy negativos, siendo hoy la principal preocupación de la población.
Tal como sostiene el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), el Estado nacional tiene un exceso de gasto sobre sus ingresos que no logra cubrir con deuda captada de forma voluntaria; esto genera una masiva emisión monetaria que, al no ser demandada por la población, termina presionando sobre los precios.
Para IDESA, lamentablemente no hay fundamentos para esperar que en los próximos meses el proceso inflacionario se detenga; por el contrario, la entidad advierte en un reciente informe que con proyecciones por encima de los tres dígitos, lo peor está por venir.
Esto ocurre en una Argentina donde los niños son los más perjudicados. Es que según los datos de las pruebas Aprender, el 70% de las criaturas que habitan los hogares pobres no llegan a un nivel básico o llegan apenas al nivel básico en lengua y matemática. Y de acuerdo a los recientes datos del INDEC, el 50% de los menores de 14 años habitan en hogares pobres. Esto significa que, el 35% de los niños son pobres y no saben leer, escribir, sumar ni restar.
Es imposible negar la crisis. Los argentinos están a la espera de una salida, pero hasta ahora los resultados son desalentadores. Queda al desnudo la imperiosa necesidad de un ordenamiento de la actual situación, que permita por un lado acabar progresivamente con el drama presente de la inflación y por otro lado crear las bases de un futuro mejor, para lo cual no deben olvidarse las dificultades hoy afectan profundamente a la infancia.
• El Ciudadano