A casi dos años del crimen de Joaquín Paredes (15) en Paso Viejo, el juez de Control de Cruz del Eje, Rogelio Archilla, elevó la causa a juicio, aunque aún no fijó fecha.
Un total de seis policías se sentarán en el banquillo de los acusados, de los cuales cinco deben responder por homicidio calificado y tentativa de homicidio, mientras que uno por amenazas.
Cabe recordar que el adolescente fue asesinado con un tiro policial por la espalda en la madrugada del 25 de octubre del 2020, cuando en plena pandemia se encontraba junto a sus amigos en una plaza de Paso Viejo, un pequeño pueblo del noroeste cordobés.
Los agentes Mayķel Mercedes López (24), autor del disparo mortal, y Enzo Ricardo Alvarado (28) son los únicos policías detenidos.
En tanto, los agentes Iván Alexis Luna (24), Ronald Nicolás Fernández Aliendro (26) y el sargento Jorge Luis Gómez (33) recuperaron la libertad bajo fianza. No obstante, se encuentran en pasividad.
Los cinco están acusados por homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por su condición de policías, tentativa de homicidio calificado y abuso de armas.
El sexto implicado es el subcomisario Alberto Daniel Sosa Gallardo, quien está imputado por supuestas amenazas calificadas.
De acuerdo a lo que trascendió en la prensa capitalina, la defensa apelará la medida de elevación a juicio. Ante esta situación, es posible que el inicio del juicio se extienda en el tiempo. Será la Cámara del Crimen de Villa Dolores la encargada de resolver el expediente.