Desde el Consorcio de Regantes Río de Los Sauces, indican que en 2022 se entregó sólo el 40 por ciento del agua que se estipula para la zona de riego. Para alcanzar ese nivel en este 2023, harían falta varias lluvias torrenciales.
La periodicidad de lluvias en el Valle de Traslasierra se hace sentir particularmente desde 2020. Desde octubre hasta ahora, han ocurrido con escases, siendo menores a las que se esperaban y la crisis es evidente.
Desde el Consorcio de Regantes Río de Los Sauces, en este marco, el ingeniero dolorense Jorge Gasser apuntó que la situación es preocupante.
“En 2022, entregamos sólo el 40 por ciento del agua que se estipula para la zona de riego, no hubo más, y ahora harían falta varias lluvias torrenciales para recuperar el nivel; no está tan mal, pero tampoco estamos tranquilos”, dijo en declaraciones al rotativo La Voz.
La papa
El Dique La Viña es el “tanque de agua” de la zona, sobre todo de la zona baja. Su dotación debe alcanzar para nutrir todo el año a varias localidades que suman unos 100 mil habitantes, y para regar más de 11 mil hectáreas de cultivo.
“El 90 por ciento del área de cultivo es de papa, una producción que tiene dos cosechas por año y requiere mucha agua”, dice Gasser ante el tabloide capitalino, al tiempo que agrega: “El 99 por ciento del riego se realiza por inundación, una modalidad en la que hay un gran derroche, algo que debería cambiarse”.
En la zona agropecuaria del Valle de Traslasierra, los cultivos con riegos por aspersión o goteo representan un porcentaje ínfimo.