Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Violencia y reflexión: dos partidos suspendidos marcaron un domingo oscuro para el fútbol

El pasado domingo, la jornada futbolística en la región terminó de manera caótica. Dos encuentros —uno del Torneo Federal y otro de la Liga Dolorense, en cuarta división— fueron suspendidos por hechos de violencia dentro del campo de juego. Las imágenes dejaron un interrogante: ¿qué está pasando con el fútbol local?

El último domingo no fue uno más en el calendario deportivo del oeste cordobés. En dos canchas distintas, y bajo competencias diferentes, la violencia volvió a ganarle al juego.

Por un lado, en el marco del Torneo Federal, el partido entre Sarmiento y Comercio fue suspendido al término del primer tiempo. Durante la salida hacia los vestuarios se produjo una presunta agresión —o intento de agresión— contra el árbitro, lo que motivó la interrupción definitiva del encuentro. El hecho se registró ante la presencia policial, que respaldó la decisión del juez del partido.

Por otro lado, en la cancha donde se disputaba el clásico de cuarta división entre Sarmiento y San Brochero, la situación fue aún más grave. Una discusión dentro del campo derivó en una batalla campal entre jugadores y allegados, con escenas de descontrol. Los videos que circularon en redes sociales mostraron golpes, corridas y la impotencia de varios jóvenes que, sin entender del todo lo que pasaba, decidieron no participar y se mantuvieron al margen.

El reflejo de un problema mayor

Aunque los hechos ocurrieron en distintas competencias, la coincidencia temporal y la naturaleza de los disturbios exponen un problema que atraviesa al fútbol regional: la falta de contención y el deterioro del sentido formativo del deporte.

Sin embargo, en medio de los disturbios, algunos jóvenes futbolistas de ambos equipos se apartaron del conflicto (foto). Su actitud, tan discreta como valiente, fue destacada por varios presentes en la jornada.

Esa reacción, casi instintiva, fue el único gesto luminoso en un domingo marcado por la oscuridad. Y acaso el punto de partida para un debate que ya no puede seguir postergándose: ¿qué tipo de fútbol se está construyendo en la región?