María Emilse Molina enfrentará un juicio por el macabro crimen de Omar Cabrera. La acusan de asesinarlo con un palo de amasar, descuartizar su cuerpo y hervir los restos para deshacerse de ellos. La justicia desestimó el pedido de nulidad presentado por su defensor.
El juez de Competencia Múltiple de Villa Cura Brochero, José María Estigarribia, confirmó la elevación a juicio de la causa que acusa a María Emilse Molina, vecina de Nono, por el homicidio calificado por codicia de Omar Eduardo Cabrera.
La resolución desestimó el planteo de nulidad de las pericias psicológicas y psiquiátricas presentado por el defensor oficial, Joaquín Contreras. Estas pericias confirmaron que Molina comprendió la criminalidad del hecho y actuó con plena conciencia.
Según el expediente, la relación de amistad entre Cabrera y Molina comenzó en 2021, marcada por asistencia económica que él le brindaba. Sin embargo, entre el 24 y el 27 de abril de 2024, en el domicilio de Molina, ubicado en barrio Costa del Sol, se desató una discusión, presuntamente motivada por temas económicos.
La fiscalía sostiene que Molina, con intención de eludir deudas y obtener acceso a los bienes de Cabrera, lo golpeó en la cabeza con un palo de amasar, causando su muerte. Posteriormente, habría descuartizado el cuerpo con una cuchilla, hervido las partes y distribuido los restos en bolsas para trasladarlos al sitio APA 2, cercano al Dique La Viña, donde los descartó en senderos de la zona.
La autopsia determinó que el descuartizamiento fue post-mortem, mientras que la causa de muerte fue un traumatismo cráneo-encefálico provocado por un objeto contundente.
La gravedad del hecho y la precisión de las pruebas serán centrales en el juicio que buscará esclarecer este macabro crimen que conmocionó a la región de Traslasierra.