Siguen apareciendo nuevas cotizaciones por la escasez de reservas internacionales. Ya son más de 10 tipos de cambio diferentes y sigue la cuenta. La incertidumbre y la especulación que esto genera son devastadoras para la economía real.
La existencia de múltiples tipos de cambio es un claro reflejo del agotamiento de las reservas. A pesar de que este tipo de medidas son claramente de corto plazo ya que sus efectos se esfuman con el paso de los días, se continúan anunciando políticas similares que tan solo funcionan como “parches” para frenar un problema estructural.
Así tenemos hoy una multiplicidad de tipos de cambio. Ya hace rato que en Argentina coexiste un dólar oficial con un dólar mayorista, un dólar turista, un dólar ahorro, un dólar para operaciones bursátiles y un dólar blue.
Pero por si no fuera poco, en los últimos días han ido apareciendo otros tipos de cambio adicionales. Estos son: dólar Qatar (para el turismo en el exterior y gastos con tarjetas en divisas que superen los U$S 300 mensuales), dólar lujo (para las compras de bienes de lujo en el exterior), dólar tecno (para fomentar el sector del conocimiento) y dólar Coldplay o Cultura (para recreaciones y actividades artísticas contratadas en el exterior).
La existencia de más de 10 tipos de cambio es un fuerte desincentivo a las inversiones en el sector real. Por un lado, las desvía hacia el sector financiero, al incentivar la especulación que resulta de cotizaciones diferenciales. Por otro lado, fomenta actividades fraudulentas. Otro problema grave surge del acceso sumamente restringido de dólares para importar que tienen muchos sectores productivos, a lo que se suman directamente restricciones para importar.
¿Qué debe hacerse?
Lo primero que debe reconocerse es que la existencia de múltiples cotizaciones es consecuencia de un error de diagnóstico. La falta de reservas es un resultado de exceso de pesos que provienen del desequilibrio fiscal.
Es por ello que la solución es ordenar el gasto público para reducir el déficit fiscal, empezando por mejorar la gestión de las tarifas y de los planes asistenciales. Hay que dejar de tomar medidas que funcionen como “parches” a corto plazo y empezar a pensar en un ordenamiento integral del Estado para solucionar lo que justamente presiona sobre las reservas, que es la emisión monetaria y el endeudamiento público.
Una alternativa más a corto plazo, pero mejor que lo que tenemos hoy en día, sería un desdoblamiento formal en solo dos tipos de cambio: un dólar oficial o comercial para las exportaciones e importaciones, y otro financiero, libre, destinado al resto de las actividades económicas.
• Por: Instituto para el Desarrollo Social Argentino.