La Comisión de Derechos Humanos por la Memoria, la Verdad y la Justicia de Traslasierra participó, junto a organizaciones y vecinos, del homenaje a Hebe de Bonafini, desarrollado ayer en la Plaza de Villa de Las Rosas.
“Mujeres que portamos pañuelos blancos, símbolo inequívoco de la lucha de las Madres y Abuelas por los derechos humanos de sus hijos, marchamos al son de los tambores cómo parte de una cultura ancestral de la que somos parte”, valoraron.
«Madres de la Plaza, el pueblo las abraza»; «Hebe presente ahora y siempre», fueron las consignas abrazadas por los manifestantes y que seguirán convocando al colectivo de derechos humanos. “‘Amor con amor se paga’”, es la frase que resume nuestros sentires”, pusieron de manifiesto los participantes del homenaje póstumo.
En la Plaza
Paralelamente a la marcha en Traslasierra, las cenizas de Hebe, última presidenta de Asociación Madres de Plaza de Mayo, fueron esparcidas en la tarde del jueves en la Plaza de Mayo, en una multitudinaria y emotiva ceremonia de la que participaban dirigentes políticos, sociales y gremiales, además de referentes de la cultura.

Como es tradición cada vez que fallece una de las integrantes de la Asociación, las cenizas de Bonafini fueron colocadas en un hoyo cavado en el jardín del perímetro que rodea la Pirámide de Mayo, momento que fue acompañado por otras integrantes de Madres, en medio de un fervoroso aplauso que derramó al resto de la histórica Plaza.
45 años de lucha
La Plaza desbordó las expectativas de las Madres que convocaron a participar de su tradicional ronda de los jueves para homenajear la memoria y legado de quien fue su presidenta desde 1979, fallecida el domingo pasado a los 93 años.
Los restos de Bonafini descansan en la Plaza de Mayo, al igual que los de Azucena Villaflor de Vicenti, la primera madre; las cenizas permanecen enterradas en la base de la Pirámide de Mayo, el mismo sitio donde hace 45 años las mujeres de pañuelo blanco comenzaron su lucha por los derechos humanos y contra el terrorismo de Estado.

