SOCSA (Sarmiento) advirtió al Concejo Deliberante que el desfase económico generado por el aumento de costos y la falta de actualización tarifaria pone en riesgo la continuidad del servicio de transporte urbano en Villa Dolores. La empresa reclama una compensación millonaria para mantener el equilibrio financiero del contrato y garantizar la prestación.
La empresa concesionaria del transporte público urbano en Villa Dolores, SOCSA S.R.L., informó formalmente al Concejo Deliberante sobre una situación que consideran crítica y que afecta la sustentabilidad económica del servicio, la cual amenaza la continuidad del sistema de transporte.
Origen del conflicto
SOCSA explicó que al momento de firmar el contrato de concesión en julio de 2018, se establecieron parámetros económicos y tarifarios que hoy resultan obsoletos debido a cambios externos imprevisibles.
Entre estos factores, la empresa destacó: la significativa suba del combustible, incrementos sustanciales en los costos laborales y salariales del personal, el aumento en los precios de las unidades de transporte para renovación y mantenimiento, la reducción en la cantidad de pasajeros transportados y la suspensión o reducción de subsidios nacionales destinados al servicio.
Estos elementos, asegura la empresa, provocaron un desequilibrio en la llamada “ecuación económico-financiera”, concepto elemental para mantener un balance justo entre los costos que enfrenta la empresa y los ingresos derivados de la tarifa.
Reclamos formales
Desde el inicio del problema, SOCSA informó que realizó reiteradas comunicaciones con la autoridad municipal, advirtiendo la variación negativa y solicitando la actualización tarifaria conforme a lo establecido en el contrato y la normativa vigente. La empresa destacó que la tarifa debería revisarse al menos dos veces al año o cuando se detecten aumentos en costos, medida que la firma asevera no ha sido implementada de forma suficiente.
El desfasaje acumulado que reclama la empresa alcanza la suma de $278.651.283,81, monto que SOCSA afirma haber afrontado con recursos propios para garantizar el servicio. Este desbalance, se comunicó, pone en riesgo el pago de salarios del personal y la continuidad misma del transporte urbano.