El Gobierno nacional anunció un paquete de medidas que busca incentivar el uso de los llamados “dólares del colchón”, flexibilizando controles sobre operaciones financieras de personas y empresas. El plan, denominado “reparación histórica de los ahorros de los argentinos”, se aplicará en dos etapas.
Desde el 23 de mayo, se eliminan regímenes informativos que obligaban a reportar consumos con tarjetas, transferencias, operaciones inmobiliarias y otras transacciones. A su vez, se elevan los montos a partir de los cuales los bancos deben informar movimientos financieros: por ejemplo, las transferencias bancarias se informarán desde los $50 millones, y los plazos fijos desde los $100 millones.
En una segunda etapa, el Ejecutivo enviará un proyecto de ley para “blindar” a los ahorristas ante futuros cambios normativos y reformar el régimen penal tributario.
El ministro de Economía, Luis Caputo, sostuvo que el objetivo no es atraer dólares al sistema financiero sino “dar mayor libertad a las personas para usar sus ahorros”.

