Este jueves, Villa Dolores perdió a una de sus voces más entrañables. Hugo Alaniz, conocido en el aire como Alán Bagó, falleció dejando un profundo vacío en la radiofonía local. Su voz, inconfundible y cargada de identidad, marcó generaciones de oyentes y se convirtió en un símbolo del éter traslaserrano.
Alán Bagó no solo fue un locutor. Fue un artista de la palabra, un comunicador que supo emocionar, informar y acompañar a la comunidad con estilo propio. Con una cadencia única, una calidez difícil de igualar y una impronta que trascendía el micrófono, se ganó el cariño y respeto de colegas y oyentes por igual.
Durante décadas, su voz fue compañía en las casas, en los autos, en los negocios. Fue testigo de la historia cotidiana de Villa Dolores y protagonista del paisaje sonoro de la región. Su sello distintivo quedará grabado en la memoria colectiva como uno de los más importantes de la historia radial local.
La partida de Alán Bagó deja una huella imborrable y una nostalgia profunda en quienes crecieron escuchándolo. Su legado, sin embargo, seguirá vivo en cada recuerdo compartido, en cada grabación guardada y en cada corazón dolido por su ausencia.
Desde El Ciudadano, abrazamos a su familia, amigos y colegas en este momento de dolor. La radio de Villa Dolores jamás sonará igual sin su voz.
• Foto: Radio Verdad.