En verano, los ríos del Valle de Traslasierra pueden tornarse altamente peligrosos a raíz de precipitaciones pluviales en sus cuencas y las consecuentes crecientes. Es por ello que tanto los vecinos locales como los turistas deben acatar las recomendaciones de las fuerzas de seguridad locales, que ante la ocurrencia de fenómenos climáticos disparan alarmas en la población con el fin de resguardar la vida y los bienes de las personas.
Las crecientes se comportan de manera muy explosiva y los ríos cambian de color cuando están por aumentar su caudal, se tornan marrones, empiezan a oscurecerse por el arrastre de sedimentos y empieza a haber espuma en las orillas. Es allí cuando hay que alejarse rápidamente y ponerse en zona segura.
Esto no tuvo en cuenta un hombre que esta semana intentó cruzar un río del Valle de Traslasierra pese a la advertencia de la Policía y su auto quedó tapado por el agua.
Fuentes policiales indicaron a la prensa que el turista, oriundo de Río Segundo, hizo caso omiso al pedido de los agentes y lo mismo intentó cruzar el vado del Río Panaholma. Pudo avanzar solo unos metros hasta que el caudal de agua empezó a arrastrarlo.
Personal del Destacamento de Panaholma rescató al hombre de 44 años que iba a bordo de un Citroën Berlingo color gris. El vehículo fue llevado por la corriente y quedó encajado en las piedras y tapado por el agua. Mientras que el conductor logró salir ileso y fue atendido en ese mismo lugar por un servicio de emergencias.