En el marco de la investigación por las cinco muertes de bebés registradas entre marzo y junio de este año en el Hospital Materno Neonatal de la ciudad de Córdoba, se confirmó que dos de las criaturas fallecieron a causa de una hiperpotasemia. Se trata de exceso de potasio, sustancia que fue inyectada de manera intencional.
Cabe recordar que el fiscal Raúl Garzón, a cargo de la causa, dispuso la semana pasada la detención de una enfermera (foto) de ese nosocomio, identificada como Brenda Agüero, de 27 años, y la imputó por el presunto delito de homicidio calificado por procedimiento insidioso, artículo 80, inciso 2, del Código Penal.
Asimismo, imputó a la directora del establecimiento; al jefe de Departamento y a la jefa del Servicio de Neonatología, como supuestos autores del delito de omisión a los deberes de funcionario público, artículo 249 del Código Penal.